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VW Touran

Las ventajas

• Gran selección de motores diésel.
  
• Buen consumo de combustible.
  
• Configuración de asientos altamente personalizable.
  
• El lavado de cara exterior es suave.
  
• Rating de 5 estrellas NCAP en seguridad.

Las desventajas

• Espacio del conductor nada atractivo
  
• Motores de gasolina muy prescindibles
  
• No tiene suficientes opciones de equipamiento

Descripción

Desde el éxito del Renault Scenic y el Opel Zafira en los 90, muchos fabricantes han intentado sumarse a la competición de los deportivos utilitarios. El Touran es el intento propuesto por Volkswagen, lanzado en 2003 y construido en un chasis modificado del Golf Mk5 que ha vendido bien desde entonces. El nombre denota que el coche es una versión “tour” del más grande Sharan. Ahora mismo nos encontramos con la segunda generación del Touran.

Primera generación (2003 - 2010):

El Touran original se convirtió en un líder de su clase con su lanzamiento, contando con un gran chasis así como innovaciones en el plano tecnológico, como dirección electromecánica. La dirección electromecánica cambia la intensidad del giro dependiendo de la velocidad del vehículo. Para poder competir con el Opel Zafira también contaba con una opción de siete asientos para las familias más numerosas. El modelo más vendido fue el TDi de 2.0 litros, que representaba una novedad por aquel entonces, y que ofrecía buen rendimiento con un consumo de combustible razonable. Desde el lanzamiento del modelo original, la competencia del deportivo utilitario compacto ha crecido mucho, disminuyendo la capacidad del Touran de sobresalir con su gran chasis Golf MK5 y altos niveles de equipamiento. Esto llevó al lanzamiento de la segunda generación en 2010, que es básicamente una versión mejorada y de aspecto renovado de la primera generación.

Segunda generación (2010 - presente):

Lo más destacable de la segunda generación es la mejora en términos estéticos y un nuevo rango completo de motores de cuatro cilindros entre los que elegir. Por fuera, el Touran parece mucho más elegante, con el morro más propio de un salón ejecutivo que de un deportivo utilitario. En cuanto a los motores, el rango está dominado por diésels, mientras que los pequeños motores de gasolina de 1.2 y 1.4 litros conforman la opción de gasolina. La configuración de 1.2 litros le queda un poco corta al Touran, pero la de 1.4 litros está llena de vida. Pero es el diésel de 1.6 litros la que sobresale como la mejor opción del rango, con la fiabilidad y el rendimiento de torque que se podría esperar de un sólido TDi de Volkswagen. El más pequeño del rango diésel es el que destaca por sus muy buenas características de consumo. Los motores diésel más grandes están bien pero el Touran no cuenta con el buen manejo necesario para sacarle todo el provecho a esa potencia extra.

El interior es resistente y sólido, pero poco imaginativo. La impresión de salón de ejecutivos se termina con el estilo exterior, desgraciadamente. Aún así, cuenta con unas configuraciones de asiento muy prácticas que los ingenieros dicen que puede llegar a ofrecer hasta 39 configuraciones distintas. Encontrarlas todas podría estar bien para entretenerse durante un fin de semana, ¿no? en general todo el interior parece poco inspirado.

Conclusión

El Touran de hoy no cumple con las expectativas que su predecesor marcó en 2003. Algunos toques como el asistente para las luces de xenon, o las nuevas configuraciones de asiento, no son suficiente. La competencia lo hace todo un poco mejor y si te interesa un pack de deportivo utilitario te conviene mejor echarle un ojo al Ford B-MAX, al Opel Meriva o al Citroën Berlingo.